- A Jaime
le entusiasmaba que yo remara: "Pa' que se te pongan los brazos de luchador"
- ¡Todo cambio el día en que a mi marido se lo raptó un hombre!
Esta
mujer escuálida usa delantal de mascotita rosa sobre un triste vestido de poliéster, medias de futbolista -de color distinto
cada una- y sandalias de plástico. Se aferra a una bolsa vacía de mandado como si fuera su último sostén en la vida.